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Mick

Michael Thomas (él), Gerente General de nuestra mina Broadmeadow en Australia. Esta es su historia. 

He sido muy privilegiado porque no he encontrado obstáculos en mi progreso profesional ni en mi capacidad para participar plenamente en los procesos de trabajo. Por eso, soy muy consciente de que debo ser curioso y tratar de entender el camino que otros han recorrido y, como líder, puedo crear activamente oportunidades que promuevan una experiencia mejorada para todos

Pasé la primera parte de mi carrera laboral en el ejército, donde aprendí que el trabajo en equipo es esencial para el éxito.  Según mi experiencia, los mejores y más exitosos equipos fueron los que crearon un entorno en el que todo el mundo estaba empoderado y capacitado para contribuir, y en los que las diferencias individuales y la diversidad se reconocían como multiplicadores de fuerza que proporcionaban una ventaja ganadora.

Acceder a los beneficios que conlleva un lugar de trabajo inclusivo y diverso es muy importante y beneficiará a todos. La pura verdad es que los equipos más diversos son más seguros y productivos; además, ¿quién no quiere formar parte de un equipo ganador?  La diversidad representa una oportunidad para rediseñar el trabajo y nuestros lugares de trabajo para que la experiencia laboral sea más segura y satisfactoria para todos los miembros del equipo.

La minería es una gran industria con multiplicidad de oportunidades. Como miembro del Consejo de Inclusión y Diversidad, estoy motivado a garantizar que nuestros lugares de trabajo y campamentos sean seguros para todos y que se aborden los obstáculos físicos, como la vivienda, el cuidado de los niños, el diseño del trabajo y la flexibilidad, para mejorar la experiencia de todas las personas empleadas por BHP. 

No existen los malos equipos, solo los malos líderes. Tenemos que hacernos cargo y crear un entorno que favorezca la inclusión y la diversidad. Debemos estar preparados en cada oportunidad para hablar con nuestra gente sobre los beneficios de la inclusión y la diversidad. Y debemos hacer frente a cualquier conducta irrespetuosa que desvirtúe nuestra misión y debilite a nuestro equipo.  

Debemos comenzar a ser espectadores activos. Debemos esperar y premiar comportamientos que apoyen una cultura de cuidado y respeto en todos los niveles.  Con curiosidad y al tratar de entender la experiencia de los demás, podemos generar oportunidades y potenciar la innovación en nuestros lugares de trabajo. 

Mientras sigamos desafiando el statu quo, nuestros mejores días están por delante.